Te enseñamos paso a paso cómo hacer un jardín zen en miniatura y los materiales necesarios para lograrlo.
Los jardines zen son espacios increíbles que irradian tranquilidad, calma y estética, pero no todo el mundo tiene la capacidad y, sobre todo, el espacio para llevarlos a cabo en tamaño real. Por este motivo, año tras año aumenta el número de personas que se animan a hacer un jardín zen en miniatura en su propia casa. Además de servir como elemento decorativo de interior, el propio proceso de elaboración es muy entretenido. Así que si te estás planteando diseñar uno tú mismo, aquí te contamos cómo.
Materiales necesarios para hacer un jardín zen en miniatura
- Caja, recipiente, bandeja u otro elemento que sirva como base
- Arenas decorativas. La ideal es la arena blanca zen
- Piedras o rocas como triturados o cantos rodados
- Rastrillo pequeño, tenedor o palillo para hacer formas en la arena
- Otras decoraciones: velas, incienso, plantas artificiales, pequeño buda...
Paso a paso: Cómo hacer un jardín zen en miniatura
Una vez que tengamos todos los materiales, podemos empezar a diseñar nuestro jardín zen en miniatura:
Extiende la arena decorativa por la base elegida. Hazlo de manera uniforme y trata de que quede todo a la misma altura para que el grosor de la primera capa sea similar en cada zona.
Coloca las piedras o rocas sobre la base, donde tú quieras.
Si has elegido un buda, incienso o velas que vayan a formar parte del interior del jardín zen en miniatura, es momento de colocarlos.
Realiza formas en la arena con el rastrillo y juega con el resto de elementos que forman parte de la composición. Aquí no hay reglas, así que déjate llevar. (Si necesitas inspiración, aquí tienes 25 ideas para crear movimiento en la arena).
Si has utilizado un pequeño rastrillo, puedes colocarlo para que forme parte de la decoración del jardín.
Por último, puedes utilizar una resina ligante para fijar la arena y que tus dibujos no se deformen con el paso del tiempo.
